3 realidades que el viajero frecuente enfrenta en la era del Coronavirus
Columna originalmente publicada por el periódico El Financiero 02 de marzo de 2020
2,996 muertes, derivadas de 88,587 enfermos confirmados de COVID-19 en el mundo, no son un fenómeno que pueda ser ignorado por el viajero frecuente.
Si bien 80,025 de los casos confirmados acumulados han sido en China continental, el hecho de que Corea del Sur reporte 3,736, Italia 1,694 e Irán 978 es reflejo de que el virus está siendo diseminado por el mundo, precisamente por viajeros globales de toda índole.
El estudio de los casos acumulados y los de casos existentes es alentador en el continente americano. El grado de dispersión permanece afortunadamente modesto. México sólo ha reportado 5 casos al mundo, Brasil 2, Ecuador 6, Canadá 24 y Estados Unidos 76.
¿Qué realidades debemos ponderar quienes en razón de nuestro trabajo u otros propósitos viajaremos este año? Aquí 3 para la reflexión:
1) CDC ya publicó un estudio de riesgos estratificado por países.- El Centro de Control y Prevención de Enfermedades de los Estados Unidos actualiza en línea su estudio de riesgos estratificado por regiones y destinos para los viajeros de su país. Aquí puede ser consultado: (www.cdc.gov/coronavirus/2019-ncov/travelers/index.html).
CDC recomienda evitar viajes no esenciales a China, Irán, Corea del Sur e Italia, argumentando que la transmisión sostenida en esos países es generalizada y explicando, que la más mínima visita a los primeros dos destinos puede enfrentar restricciones para ingresar a E.U. A Japón, sólo recomienda posponer el viaje a personas mayores o individuos con padecimientos médicos crónicos.
2) Más de 50 aerolíneas en el mundo ya ha suspendido vuelos a China.- Y no se ve claro cuando se vaya a normalizar la conectividad aérea intercontinental con ese país afectando no sólo el flujo de pasajeros, sino el flujo de carga aérea multi-destino.
La medida se entiende como parte de los rigurosos esfuerzos de contención del Coronavirus, pero es imposible no visualizar impactos en el sector turístico global. China es el mercado de turismo emisor más grande del mundo. Aporta cerca de 150 millones de viajeros internacionales al año a una diversidad enorme de países.
3) En tanto no se supere la epidemia, abundancia de prevención.- Mentalicémonos de que habrá controles rigurosos en el ingreso a ciertos países a pasajeros que hayan estado en zonas afectadas por el Coronavirus y que habrá mediciones automatizadas de la temperatura de todos los pasajeros al abordar o descender casi cualquier medio de transporte transfronterizo.
Y no nos sorprendamos ante las cuarentenas autoimpuestas u obligadas de pasajeros que –presentando síntomas o no— inviten a pensar que han estado expuestos directa o indirectamente al posible contagio.
Eventualmente el mundo aprenderá a mitigar el COVID-19. La ciencia médica desarrollará un tratamiento razonablemente efectivo para acelerar la sanación de pacientes infectados de todas las edades y, en el mejor de los casos, descubrirá alguna forma de mantenernos inmunes al desarrollo de la enfermedad.
Entre que eso sucede, los viajeros de empresa y de placer tendremos que elevar al máximo las precauciones de asepsia que sí están a nuestro alcance, incluyendo evitar viajar con padecimientos menores que –pudiendo no ser contagiosos– podrían disparar alarmas por elevación de temperatura o crear incomodidad en el resto de los pasajeros.
Así que cualquiera que sea la razón que motive su siguiente viaje, no estaría nada mal que le haga caso a la única recomendación de altísimo sentido común que la CDC hace a quienes viajan a México: “Los viajeros deben evitar el contacto con personas enfermas y lavarse las manos con jabón de manera frecuente por 20 segundos”.
En una de esas, evitamos otras enfermedades que viajan en aviones, trenes y barcos también.